lunes, 25 de octubre de 2010

Y así fue como dejé a aquella chica.

Se quitó sus sucios tacones y los arrojó a la otra punta de la habitación.
Los hielos de su cuartillo de whisky ya se habían consumido, pero a ella no le importó, bebió de trago todo lo que le quedaba y con una mueca en su cara me reveló que su esófago no ardía lo suficiente.
Se encendió un cigarrillo y rebuscó en su bolso.
Sacó una bolsita que no pesaría más de 2 gramos y decidió que no cabría en la mesa, así que lanzó por los suelos la botella de Jack Daniel`s y el vaso que había a su lado.
El vidrio se rompió en mil pedazos y mi corazón en cuatro mil. Sabía perfectamente lo que iba a hacer.

Polvos en su nariz significaban polvos en mi cama, pero la verdad, a mi no me compensaba.

19 comentarios:

  1. No creo que a nadie le compense, hay que ser muy tonto.

    De todas formas, me quito el sombrero. Es MUY bueno.

    Besos.

    ResponderEliminar
  2. estoy con Dana, dudo que a nadie le compense.
    pero aún así... tremenda atmósfera, de verdad.

    ResponderEliminar
  3. Una nueva tableta de chocolate se está creando aquí, conócela... ¡Quién sabe si puedes ser tú parte de ella!
    ;)

    ResponderEliminar
  4. No creo que compense.
    Me parece que conozco polvos mejores. jajaja

    besos resfriados.

    ResponderEliminar
  5. Y a ella tampoco le compensa, yo me hubiese quedado con Jack indudablemente!
    Un beso!

    ResponderEliminar
  6. Que textazo.. joder.

    Y yo creo que nada lo compensa, no. Aunque, a veces cuando uno quiere a alguien, pasa por todo.

    ResponderEliminar
  7. Los polvos mágicos se echan, no se esnifan!

    Saludos terráqueos, astro-ta

    ResponderEliminar
  8. Si hacía muxo k no nos visitabamos!! jjaja pro ahora ya volvemos a lo de antes!

    nunca unos polvos se merecen de otros. Así que se quede con los sanotes jajajaj

    ResponderEliminar
  9. a mi no me compensaba acostarme con ella cuando a ella la apeteciera
    siempre ella poniendo normas.. y no !

    ResponderEliminar
  10. Muy loco de amor tenía que estar para aguantar una y otra vez las roturas de su corazón y el cuerpo de la chica.
    Desde Marte
    Mirna

    ResponderEliminar
  11. Habrá que buscar un equilibrio entre tanto polvo.

    ResponderEliminar
  12. No es bueno que esos trocitos de corazón estén esparcidos por el suelo...

    ResponderEliminar
  13. Yo si fuese él me hubiese quedado con ella.
    Me gustó mucho el escrito.

    ResponderEliminar